Tras varios años de exitosa andadura en Madrid, llega a Valencia, en pleno barrio de la Petxina, un nuevo servicio, cálido y cercano, donde trabajar este tipo de problemática. Este nuevo espacio supone un recurso valioso para practicar un envejecimiento activo y, en definitiva, mejorar la calidad de vida. Es también el lugar indicado para poder rehabilitar secuelas cognitivas secundarias a algún tipo de daño cerebral sobrevenido, que supongan una alteración de las capacidades de la persona, en adultos de cualquier edad. Existe la posibilidad de trabajar en grupos pequeños o de manera individual, según el perfil y las necesidades específicas de cada persona.

Además, para facilitar el acceso a cualquier persona que lo desee y que no pueda o quiera desplazarse hasta el local, memoriK ofrece la posibilidad de recibir estos servicios a distancia, con el apoyo de las últimas tecnologías (plataforma de estimulación cognitiva o sesiones virtuales). De este modo, la persona puede recibir las sesiones desde la comodidad de su hogar, con la flexibilidad que esto supone.

Su directora, Alba Zamorano, con numerosos años de experiencia en el campo de la estimulación y rehabilitación cognitiva, comenta lo siguiente: «Al igual que ahora todos tenemos presente lo importante que es la actividad física para el cuerpo, es necesario ser conscientes de que nuestro cerebro también necesita una actividad específica para optimizar nuestras funciones cognitivas, tanto para prevenir posibles dificultades como para hacerles frente si ya se están presentando”.